El alcoholismo ¿Es una enfermedad?
Esta es mi tercera entrega para todos ustedes. En esta ocasión, hablaremos acerca del alcoholismo, a partir de la necesidad que tiene todo individuo una vez que sospecha que tiene en su vida, algún grado de problemas con su manera de beber licor.
Tomando en consideración que el alcoholismo es una enfermedad, la cual ha sido explicada magistralmente por el Doctor William Duncan Silkorth. Esta explicación se encuentra en las primeras páginas del Libro Azul o Alcohólicos anónimos y se titula La opinión del médico.
En nuestras dos anteriores entregas utilizamos esta explicación para transmitirles en que consiste dicha enfermedad, ahora, en este momento, le transmitiré la respuesta a la pregunta que se hacen muchas personas hoy en día ¿Como puedo saber que padezco de la enfermedad alcohólica? Ante esta interrogante, debo compartir con ustedes, las características mínimas de mi alcoholismo;
1-Aumento progresivo en cantidad de bebida y tiempo de consumo.
(Este proceso en mi persona se llevo a cabo en un lapso de 10 a 12 años de bebida de licor).
En otras palabras inicie bebiendo 2 o 3 cervezas, al cabo de 10 años terminé bebiendo cualquier tipo de bebida que embriagara o emborrachara. Inicie bebiendo una vez cada 6 meses y al cabo de diez años de alcoholismo, terminé bebiendo todos los días.
2-Aumento progresivo de lagunas mentales y fugas geográficas.
inicie olvidando pequeños detalles, tales como el bailar con alguna mujer en especifico, alguna conversación en medio de mis horas de bebida de licor, al cabo de los años, terminé olvidando absolutamente todo lo sucedido dentro de un lapso de 4,5,6 o más horas que utilizaba para consumir bebidas alcohólicas, es decir, en ese período en el cual estaba bebiendo, mi cerebro no guardaba el recuerdo de mis acciones, mis palabras o mis pensamientos.
Es como si nunca hubiese estado allí, eso me paso varias veces, consecuencia de eso, muchas veces iniciaba bebiendo en un lugar determinado y cuando abría nuevamente mis ojos me encontraba en otro lugar, distinto del lugar donde inicie a beber y muy distante. Era desconcertante no poder recordar como llegue a ese lugar.
3-Beber Licor al principio era divertido.
Mi mente, al cabo de diez años de estar bebiendo, estaba concentrada en el Licor, no existía nada más importante en mi vida que el licor, y por lo tanto, no tenía fuerza alguna para evitarlo. A esto, se le llama Obsesión mental por el Licor.
4-Al principio de mi vida alcohólica.
Al pasar el tiempo, dentro de mi vida de alcoholismo, se produjo la situación contraria a esto, es decir, que una vez que probaba licor, No podía parar de beber, simplemente, padecía de una sed insaciable, la cual no tenía límites.
La única forma en que paraba, era cuando mis fuerzas físicas se agotaban y caía desplomado y vencido por la borrachera. A esto se le llama compulsión física por el licor.
Estas características las tenía yo en mi vida alcohólica, la cual no fue muy extensa, en comparación a otras personas, las cuales han tenido, un historial más amplio de alcoholismo.
En lo que se refiere al alcoholismo como enfermedad en términos generales, debo decirles, que la persona debe solicitar ayuda para poder examinarse a si misma, una vez que se hace la pregunta mencionada anteriormente, toda vez que es muy difícil poder observarse a si mismo, sin que entren en juego los mecanismos mentales de todo ser humano de autojustificarse o auto engañarse.
Hay dos elementos que no fallan en la vida de cualquier alcohólico que está bebiendo licor o que ha bebido licor.
- 1-La obsesión mental
- 2-La compulsión física.
Es posible, que si una persona está demostrando una concentración feroz en sus pensamientos ya sea de manera consciente o poco consciente por el licor, en otras palabras, demuestra estar sometido por una obsesión mental por el licor, y aunado a este hecho, vive condenado a la situación aquella en la que, una vez que prueba licor, no puede detenerse, no puede parar de beber licor por sus propias fuerzas, entonces, es posible que su situación de alcoholismo sea un grave problema de salud mental, física y espiritual.
Pensar que es un simple hábito, un desajuste de su fuerza de voluntad, u otra cosa, sería fatal para la persona, puesto que, mantenerse escondido o sumergido en un razonamiento de esta clase, le traería como consecuencia la muerte, la locura o trastornos físicos irreversibles, por razón del alcoholismo que no se ha remediado en el tiempo adecuado.
Mencionamos un hecho importante en la vida de cualquier alcohólico; ayuda externa. La persona cuando sospecha que tiene problemas con su manera de beber licor, le es muy difícil, en términos generales, verse a si mismo, apreciarse a si misma, de una manera veraz y objetiva. Ya hemos dicho que los mecanismos de autodefensa se activan en el individuo, lo cual impide la tarea de autoevaluarse correctamente.
La ayuda externa debe venir en primera instancia por las personas que tienen influencia real y efectiva sobre esa persona.
Normalmente, esa influencia puede venir de la pareja sentimental de la persona, el jefe o patrón laboral, los padres o uno de los dos por si solo, un hijo o los hijos, algún familiar en específico, puede ser un sacerdote o ministro religioso, etc.
Son estas personas, las que pueden orientar al individuo que sospecha de su anormalidad con el licor, incluso, si las circunstancias y realidades de esta persona lo permiten, pueden condicionarlo temporalmente, para que pueda encontrar el camino de su recuperación.
Llegar a la conclusión de que se padece de la enfermedad alcohólica me tomo un gran lapso de tiempo, es difícil hacerlo de la noche a la mañana, más complicado es lograrlo solo y sin ayuda.
Quiero decirles que la cantidad de licor que se ingiere en la semana o en el mes en que la persona está viviendo, no genera por si misma la explicación necesaria para saber sobre el padecimiento o no del alcoholismo, lo importante, es saber si se mantiene una obsesión mental por el licor y una compulsión física por el licor.
Si existen estos dos elementos en la vida de una persona, entonces, se tendrá que considerar seriamente un candidato con problemas de alcoholismo.
Si tu caso se ha pintado en alguna medida en esta entrega, no te desesperes, ¡Hay una solución!. En mi próxima entrega, te hablaré de esa solución.
Autor: Jose. L
Grupo San Miguelito
Buenas creo q mi esposo tiene esta enfermedad alcoholica, èl cobra todos los sabados, dia q dedica para beber hasta quedar sin ningun real, pese a q sabe q tiene compromisos economicos en casa y al dia siguiente simplemente dice q no sabe que le pasa q no se puede controlar, necesito de su ayuda porfavor
ResponderBorrarGracias por comentar, para ayuda comunicarse al +507 267-2171 en horario de 6 a 8pm de Lunes a Domingo.
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